Apurados, los medios opositores, salen a mentir.
Laura Serra en el diario del genocida Bartolomé
Mitre hace la lista de los temas que nuestra Presidenta no
mencionó, por ejemplo el accidente ferroviario de Once.
Pero todo este odio apurado viene a cuento porque ayer nuestra Presidenta puso
en evidencia la forma en que ese diario trataba a Irán en una nota de
José Claudio Escribano quien, refiriéndose a Irán destacaba
(año 1999) que los iraníes "insinuaron un renovado interés por los
productos argentinos" y "después de haber desaparecido de nuestro
mercado como derivación de las IMPUTACIONES" … "que se le formularon por
la supuesta participación de su gobierno en el atentado contra la AMIA
en 1994. Irán compraba trigo por un valor cercano a los 800 millones de
dólares. La reinserción iraní entre los compradores de la Argentina ha
preocupado, según fuentes oficiales, a la diplomacia israelí. El hecho
no ha sido pasado por alto por el gobierno argentino. Tampoco este ha
dejado de computar los signos que se han ido percibiendo el último año
de una lenta recomposición de relaciones entre Washington y Teherán"
agregó Cristina: "Entonces, como Washington y Teherán estaban bien y había que
vender el trigo, estaba bien" y hoy "cualquiera que relea La Nación de
estos días advierte que no hablaba de imputaciones ni de supuestos, sino
directamente casi de condena firmada y sentencia pronta a ejecutarse".
La Nación también "ataca como partido político
y se defiende con la libertad de prensa". En el diario de hoy ataca con este titular:
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