miércoles, 27 de enero de 2010

DUHALDE Y LA DOCTRINA DE LA SEGURIDAD NACIONAL


EL ENEMIGO ES INTERNO. ES EL PUEBLO ARGENTINO.
HAY QUE PONER A LOS MILITARES EN LA CALLE PARA ASEGURAROS QUE ESOS IMBERBES QUE GRITAN EN APOYO DE CRISTINA SEAN BARRIDOS
HAY QUE PONER ORDEN. EL ORDEN FASCISTA. EDUARDO DUHALDE EX-DE MENDEZ QUIERE APLICAR UNA NEO-DOCTRINA DE LA SEGURIDAD NACIONAL. EJÉRCITO A LA CALLE.
Y MACRI LO COMPLEMENTA CON LAS ARMAS ELÉCTRICAS CON QUE ESTÁ EQUIPANDO A SU POLI-METRO.
LO QUE NO SE PUEDE NEGAR ES SU COHERENCIA. SIEMPRE FUERON LO QUE DEMUESTRAN.
Y ESO SÍ, PIDEN A GRITOS QUE NO TOQUEN LAS RESERVAS DEL CENTRAL, EH? ¿PARA QUÉ? PARA QUE TODOS LOS MORLACOS LOS PUEDAN HACER MIERDA ELLOS MISMOS EN DOS MESES TOTAL DESPUÉS VAN Y PIDEN AL FONDO MONETARIO, Y LO PAGA EL PUEBLO ARGENTINO. QUE ES EL MISMO AL QUE TIENEN POR ENEMIGO INTERNO.

LA DOCTRINA DE LA SEGURIDAD NACIONAL EN AMÉRICA LATINA
DICTADURAS EN AMÉRICA LATINA

A lo largo de todo el siglo XX, con el objetivo de conservar los aspectos centrales de un orden social que garantizaba, reproducía y ampliaba sus beneficios económicos, las clases dominantes de los países de América Latina impulsaron golpes de Estado —llevados a cabo por las Fuerzas Armadas de sus respectivos países—, y el establecimiento de diferentes tipos de dictaduras. (imagen: grupos de tareas violando la propiedad privada)

En algunos casos, como los de Nicaragua, México y Paraguay que ya estudiaste, las dictaduras significaron la continuidad sin variantes de las formas oligárquicas de ejercicio del poder, construidas durante el siglo XIX, y la negación de la mayoría de los derechos civiles, políticos y sociales. Estas dictaduras fueron ejercidas por un miembro de los grupos de mayor poder económico —o por un militar que los representaba—, rodeado siempre de numerosos familiares y amigos.

En otros casos, las dictaduras fueron impuestas por algunos sectores de las clases dominantes que intentaban recuperar el control absoluto de las decisiones económicas, ante la amenaza que, para sus privilegios materiales, representaban los cambios impulsados por los movimientos sociales que habían llegado al gobierno median­te el voto de la mayoría de la población.

Un caso particular de estas últimas dictaduras, lo representan las que se establecieron a partir de la década de 1960. Mediante diver­sos golpes de Estado fueron desplazadas las autoridades electas en la mayoría de los países de América Latina, y se instalaron dictaduras que produjeron profundas transformaciones en el orden social.

A diferencia de las anteriores, éstas fueron ejercidas por las Fuerzas Armadas como institución aun cuando, en varios casos, hayan recibido el apoyo de importantes sectores de la población y contado con la participación de numerosos civiles en el gobierno.

DICTADURAS MILITARES Y REORGANIZACION DE LAS SOCIEDADES
Y DE LAS ECONOMIAS DE AMERICA LATINA

Entre los años 1964 y 1984, casi todos los países latinoamericanos estaban gobernados por dictaduras militares. Pero, a diferencia de aquellas que representaron una continuidad del orden oligárquico construido en el siglo XIX, o de Las que interrumpieron la ampliación de los derechos de los ciudadanos propuestos por los movimientos sociales, en varios países del continente, las dictaduras militares que se desarrollaron a partir de la década de 1960, en países como Brasil, Chile, Uruguay y Argentina, buscaron transformar económica y políticamente las sociedades en las cuales se produjeron.

Las principales características comunes que encuentran ¡os investigadores, al estudiar estas dictaduras, son:

• Su conformación en países con cierto nivel de industrialización (Argentina, Brasil), o países en los que existía cierta estabilidad histórica de las formas democráticas (Uruguay, Chile).

• El haber sucedido a un período de una amplia o intensa movilización de los trabajadores y de los sectores subalternos en general.

• El rol central desempeñado por las Fuerzas Armadas como institución, tanto en los golpes de Estado que instalaron las dictaduras, como en el ejercicio del gobierno.

• La articulación, en torno de los gobiernos dictatoriales, de una coalición que expresó los intereses de las clases económicamente dominantes.

• El ejercicio del gobierno mediante equipos técnicos especializados en diferentes cuestiones, generalmente sin participación previa en partidos políticos (tecnócratas).

• La concepción de un proyecto de reestructuración de la sociedad, sobre nuevas bases económicas y políticas, a través de las cuales buscaron mantener los niveles de beneficio obtenidos por las principales empresas y revertir los avances que se habían hecho en materia de participación en la toma de decisiones de la mayoría de la población.

• La imposición del reordenamiento de la sociedad, en forma autoritaria, lo que exigió el uso permanente de la fuerza.

LAS POLITICAS ECONOMICAS

Con el fin de lograr la transformación económica, en los distintos países se aplicaron un conjunto de medidas ligadas al liberalismo, entre las cuales la más importante fue la “apertura de la economía’ para la libre importación y exportación de mercancías, es decir, la eliminación de los aranceles que gravaban la importación de productos extranjeros.

Las dictaduras militares y sus políticas económicas se propusieron —y consiguieron— la consolidación y expansión de un número reducido de empresas nacionales y/o multinacionales, en muchos casos pertenecientes a un mismo grupo, que se hicieron cargo de la producción y se apoderaron de la porción mayoritaria del mercado.

Todas estas medidas económicas fueron posibles mediante el ejercicio de la violencia, la represión de las organizaciones sociales y sindicales —la mayoría de las cuales fueron intervenidas por los militares o directamente clausuradas—, y la violación de todos los derechos humanos.

La política de apertura de a economía llevada a cabo por las dictaduras militares de la década del 70. provocò el cierre de numerosas industrias que no lograron sobrevivir a la llegada masiva de productos importados.

LAS CARACTERÍSTICAS DE LA INDUSTRIA LATINOAMERICANA EN LOS 80:

El desarrollo industria latinoamericano hacia los años 80, mostraba las siguientes características:

- Se dirigía a una reducida franja de consumidores que podían acceder a cierto tipo de bienes, como automóviles o electrodomésticos.

- No utilizaba tecnología propia (dependencia tecnológica): las empresas más dinámicas dependían de sociedades extranjeras que utilizaban, por lo general, su propia tecnología. De este modo, las actividades de “investigación y desarrollo” de los países latinoamericanos tenían presupuestos bajísimos, en relación con lo que se invertía, en esas áreas, en los países centrales.

- Resultaba escasamente competitiva en el mercado internacional, dado que producía a mayores costos, en gran medida debido al atraso tecnológico.

- Se hallaba fuertemente protegida por el Estado, que aplicaba altos aranceles a la importación de productos extranjeros, con lo cual muchas industrias maximizaron sus beneficios sin renovar la tecnología.

LA VIOLACION DE LOS DERECHOS HUMANOS

La violación de los derechos humanos no es un fenómeno reciente en América Latina, pero los niveles alcanzados a partir de la década de los setenta, de mano de las dictaduras militares, no tienen equivalentes en su historia, si se exceptúa el proceso de conquista y colonización, durante los siglos XV y XVI.

Si bien la pobreza, el desempleo, el analfabetismo, la desnutrición, los bajos niveles de salud, la mortalidad infantil y el hambre, han estado presentes durante todo el siglo XX; estos problemas sociales alcanzaron niveles sin procedentes bajo los gobiernos dictatoriales de las últimas décadas.

Las dictaduras militares,y los grupos de poder económico que las impulsaron y las sostuvieron llevaron adelante la transformaciòn de las economías latinoamericanas apelando a la represión y a lá violencia sobre la poblaciòn. Esta represión consistió, fundamentalmente, en la detención, la desaparición y el asesinato de los opositores al gobierno, incluso de muchos que no lo eran. Por otra parte, se eliminó todo derecho a la defensa en juicio y la tortura se transformó en el método corriente para la obtención de información sobre la actividad de los opositores.

Por medio del terrorismo estatal se buscò generalizar el miedo entre la población. La amenaza y el y el uso permanente de la fuerza amenazó a toda la sociedad: obreros,estudiiantes, empresarioa jóvenes, adolescentes, ancianos, bebés y niños; deportistas, intelectuales y discapacitados. Todos se tansformaron en posibles víçtimas.

A pesar de las diferencias que presantaban, las dictaduras militares poseían una forma politica: común, caracterizada por la supresión de la mayor parte de los derechos civiles, políticos y sociales. Las Fuerzas Armadas se consideraron como la instituciòn que representaba los valores de la nacionalidad y que tenía la misión de “curar” a la sociedad de los males que la afectaban. Se disolvieron los partidos políticos, o se suspendió su actividad, y las Fuerzas Armadas controlaron todos los recursos de poder.

LA DESAPARICION DE PERSONAS

Los desaparecidos constituyen una de las más pesadas herencias dejadas por la dictadura militar, tanto en Argentina como en otros países de América Latina. A diferencia de lo ocurrido con los detenidos y encarcelados, la mayoría de los secuestrados eran encerrados en centros clandestinos de detención, de los cuales se los trasladaba para ser asesinados. A partir de su secuestro, los familiares que comenzaban a solicitar informes a las autoridades, creyéndolos prisioneros en alguna cárcel del país, encontraban que los miembros de las Fuerzas Armadas siempre negaban tener conocimiento de estas personas y de lo que les había ocurrido.

En el primer año de dictadura ya había más de quince mil desaparecidos, diez mil presos,
cuatro mil muertos y decenas de miles de exiliados. (Foto: AP)

El drama de los desaparecidos es aún hoy una herida abierta en las sociedades que lo padecieron y que sólo puede cerrarla justicia.

Terrorismo estatal Se denomina de este modo a las acciones represivas llevadas a cabo por grupos de militares y civiles que conformaban las dictaduras militares de América latina, consistentes en el secuestro, la desaparición, la tortura y el asesinato de hombres, mujeres y niños, con el propósito de atemorizar y evitar cualquier tipo de disconformidad o descontento frente a las políticas económicas llevadas adelante desde el gobierno.

Uno de los aspectos más sorprendentes de las dictaduras militares que se desarrollaron en América Latina, lo constituye el hecho de que todas ellas se ejercieron elaborando un discurso en el cual se decía preparar las condiciones para el ejercicio de la “verdadera democracia”, aun cuando para ello se debieran anular algunas o todas las premisas de la misma. Los dictadores accedían al poder diciendo proteger la democracia, amenazada por la crisis económica y las protestas sociales. En nombre de la democracia, los gobiernos dictatoriales violaban todos sus principios, despreciaban la voluntad de las mayorías y anulaban o reemplazaban las Constituciones. En la mayoría de los casos, cuando la Constitución lo permitía, los dictadores se hacían reelegir regularmente, mediante el fraude o la represión de los opositores; en caso contrario, anulaban la Constitución o designaban a algún testaferro.

La justificación ideológica de las nuevas dictaduras:
La Doctrina de la Seguridad Nacional

Las dictaduras militares constituidas en la década del 70, en América Latina, justificaron las acciones represivas que llevaron a cabo, mediante la denominada Doctrina de la Seguridad Nacional. Esta doctrina se inscribió en el contexto del conflicto que enfrentaba a los países centrales del sistema capitalista, liderados por los Estados Unidos, con los países ligados a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (U.R.S.S.).

Este enfrentamiento conocido como “Guerra Fría”, debido a que nunca tuvo una declaración de guerra formal ni se tradujo en el enfrentamiento militar directo, llevó a que —a partir de la década de 1960— el gobierno de los Estados Unidos se considerase con derecho a continuar interviniendo, tal cual lo venía haciendo desde principios de siglo en Centroamérica y el Caribe, en los asuntos internos de los países latinoamericanos, instalando o sosteniendo dictaduras militares.

La intervención norteamericana se materializó no sólo mediante el apoyo económico y militar a los sucesivos golpes de Estado y a las dictaduras que éstos iniciaron sino, también, mediante la instrucción ideológica y militar de los principales oficiales de las Fuerzas Armadas en la lucha contra quienes en cada país actuaban para extender la democracia y fueron considerados subversivos.

De acuerdo con lo establecido por la Doctrina de la Seguridad Nacional, los numerosos conflictos sociales y la acción de los movimientos guerrilleros en los países latinoamericanos, y en el resto del mundo capitalista subdesarrollado, no se debía a las desigualdades económicas y sociales que colocaban a la mayoría de la población en la miseria y la injusticia, sino a la acción de comunistas al servicio de la U.R.S.S. De este modo, la citada Doctrina sostenía que quienes se oponían o enfrentaban las desigualdades sociales o las injusticias del orden social capitalista (sindicalistas, periodistas, estudiantes, profesores, religiosos, etc.) no eran más que “agentes’ de los comunistas, que buscaban destruir el capitalismo atacando

Influenciadas por las ideas nacionalistas, en la década del 30, las Fuerzas Armadas comenzaron a participar activamente en la política de los países latinoamericanos. A diferencia de las dictaduras de los caudillos militares del siglo XIX, que gobernaban a titulo personal, era la institución toda la que, luego de un golpe de Estado, se hacía cargo del gobierno, en la mayoría de los países del continente.

La Doctrina de Seguridad Nacional
Eduardo L. Duhalde. El estado terroristata argentino

“Tras la derrota de Vietnam y el rechazo que la guerra suscitó en el pueblo norteamericano, llevando incluso a la supresión del servicio militar obligatorio, la Administración debió plantearse la reformulación de la doctrina, de manera que no implicara el uso de fuerzas propias norteamericanas en la defensa continental tanto contra el enemigo interior o externo. Su reformulación es conocida como la Doctrina Nixon: reforzar la capacidad militar de los regímenes pro-norteamericanos escogidos en el Tercer Mundo y prepararlos para una función de “policía” dentro de la región.

Esta doctrina, que pone todo su esfuerzo ya no fundamentalmente en los marines o rangers norteamericanos como el reaseguro efectivo de los intereses imperialistas en Latinoamérica, sino en sus ejércitos interiores, resulta mucho más eficaz y menos comprometedora de la ya de por sí creciente tensión internacional, al mismo tiempo que evita la posible reacción de la oposición norteamericana.”

Por lo general, las dictaduras militares estaban sostenidas por un sector de la sociedad, al cual las acciones de gobierno terminaban beneficiando. Las dictaduras se propusieron, hasta la década de los 80, diferentes proyectos económicos, todos los cuales coincidían, en general, en sus características desarrollistas e industrialistas.

La incidencia de las Fuerzas Armadas en las cuestiones políticas se redujo notablemente, sobre todo a partir del fin de la denominada Guerra Fría, que significó el fin de las presiones de EE. UU. para embarcarlas en la lucha contra la “subversión comunista” en cada país. A partir de entonces, EE.UU. ha comenzado a proponer, como nueva hipótesis de conflicto para las Fuerzas Armadas del continente, la lucha contra el tráfico de drogas.

Subversivo: Este termino, cuyo significado es persona que busca con sus acciones transformar o destruir el orden social vigente, fue utilizado por las dictaduras para señalar a todos sus opositores.

los valores que lo sustentan en América Latina, esto es, la familia, la propiedad privada, la tradición y la religión católica. Todos los medios eran considerados válidos para desarrollar esta verdadera “misión” que habían asumido las Fuerzas Armadas del continente. El resultado fue la violencia indiscriminada, la tortura de opositores, la desaparición de personas, el asesinato, el robo de menores, etc.

En Argentina, a represiòn durante la ultima dictadura militar fue por momeritos indiscriminada e instaló en la población frases tales como: "Algo habràn hecho" con la cual muchos justificaron las acciones del terrorismo de estado

Pàjaros Prohibidos: ‘Los presos políticos uruguayos no pueden hablar sin permiso, silbar, sonreír, cantar, caminar rápido ni saludar a otro preso. Tampoco pueden dibujar ni recibir dibujos de mujeres embarazadas, parejas, mariposas, estrellas ni pájaros.

Didaskó Pérez, maestro de escuela, torturado y preso por tener “ideas ideológicas “, recibe un domingo la visita de su hija Milay, de cinco años. La hija le trae un dibujo de pájaros. Los censores se lo rompen a la entrada de la cárcel.

Al domingo siguiente, Milay le trae un dibujo de árboles. Los árboles no están prohibidos, y el dibujo pasa. Didaskó le elogia la obra y le pregunta por los circulitos de colores que aparecen en las copas de los árboles, muchos pequeños círculos entre las ramas:

— ¿Son naranjas? ¿Qué frutas son?

— Ssshhh.

Y en secreto le explica:

— Bobo. ¿No ves que son ojos? Los ojos de los pájaros que te traje a escondidas.”

Recreado por Eduardo Galeano, Memorias del Fuego. Siglo XXI editores, Buenos Aires, 1988, T. 3, pág. 280.
fuente: http://www.portalplanetasedna.com.ar/dictadura_latina.htm

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